Informação
O hotel localiza-se no centro da cidade, a cerca de 10 minutos a pé da zona turística, do rio, do anfiteatro romano, da estação de comboios e do Museu Nar. Existem lojas a cerca de 3 km de distância.
Este hotel urbano histórico encontra-se num convento do século XVIII, tendo mantido a estrutura do edifício original. Foi construído a partir das ruínas de um templo dedicado ao imperador romano, Augusto. O Jardim das Antiguidades trata-se de um conjunto arqueológico composto por elementos romanos, visigóticos e mudéjares. Conta com um total de 82 quartos, dos quais 3 suites júnior e uma suite. As instalações incluem ar condicionado, hall de entrada com recepção em serviço sob 24 h, cofre, guichet para câmbio monetário, elevador, café, bar, restaurante, área de estar com televisão e acesso à Internet (também sem fios, taxa extra). Mediante pagamento adicional os hóspedes poderão usufruir dos serviços de lavandaria e de quartos, do parque de estacionamento e da garagem.
Alguns quartos oferecem vista para o jardim e uma varanda, outros contam apenas com janelas, alguns são interiores e todos eles incluem uma decoração e mobiliário castelhanos. As comodidades incluem casa de banho privativa com secador de cabelo, duche e banheira, telefone com ligação directa, televisão via satélite/cabo, acesso à Internet, mini-bar, cama de casal ou kingsize, ar condicionado, aquecimento e cofre.
O hotel contempla uma piscina exterior com espreguiçadeiras e chapéus-de-sol, bem como uma sauna e um centro de fitness. O campo de golfe Don Tello fica apenas a cerca de 20 minutos de viagem.
O pequeno-almoço será servido em forma de buffet. Os hóspedes poderão tomá-lo no quarto. Poderão ainda compor o seu almoço e o jantar à la carte ou pelo menu.
O hotel localiza-se no centro da cidade, onde encontrará diversas indicações a indicar o caminho.
Avaliações
Avaliações
58 ComentáriosAntónio Augusto, viajou em
Lisboa
Viagem escapadinha em família
ótima localização e conforto.
Anónimo, viajou em
Viagem escapadinha em Casal
Antiguo hospital reconvertido en parador, en el centro de la ciudad, a un paso de la plaza de españa y monumentos a visitar.
Anónimo, viajou em
Viagem de férias em Casal
Muy buena atención del personal. Las instalaciones un poco antiguas. Por lo demás todo perfecto.
Anónimo, viajou em
Viagem pessoal/familiar em família
Uno de los paradores que más se asemejan a lo que tenemos en la cabeza cuando pensamos en un parador. Ubicación perfecta y amabilidad estupenda, como por otro lado, suele ser habitual en esta cadena.
Anónimo, viajou em
Viagem escapadinha em Casal
Habitaciones un tanto obsoletas. Ruidoso. Personal muy amable.
Anónimo, viajou em
Viagem escapadinha em Casal
Lo mejor: el personal, la comida de la cafetería y el desayuno.
Lo peor: la austeridad y antigüedad de las habitaciones.
Anónimo, viajou em
Viagem de férias em Casal
Todo magnífico.
M. Encarnación , viajou em
Córdoba
Viagem escapadinha em Casal
Ubicación y en general todo perfecto. Volvería sin duda.
Anónimo, viajou em
Viagem pessoal/familiar em Casal
Lo mejor :las zonas comunes muy bonitas, la tranquilidad y la atención del personal.
Lo peor: los recovecos que tiene el parador, para ir de la habitación al garaje, al comedor etc.
Las habitaciones excesivamente austeras y los cuartos de baño rehechos pero la grifería y demás muy antiguas y mal conservadas.
Muy caro para las habitaciones que ofrece.
Jose , viajou em
Le Perreux Sur Marne
Viagem escapadinha em grupo de amigos
Bonito hotel en el centro histórico de mérida, a proximidad de los principales monumentos. Cuenta con un aparcamiento situado debajo del hotel, nada práctico a la hora de aparcar debido al espacio demasiado estrecho de cada plaza de aparcamiento, sobre todo durante un fin de semana especialmente concurrido. Además me parece algo abusivo que un hotel de esta categoría le haga pagar el parking a sus clientes. Personal de recepción muy agradable y servicial, lo que hay que subrayar pues no es la norma general en los demás paradores. Habitación sencilla y vetusta pero agradable, aunque mal insonorizada. Cama amplia y bastante confortable. Buena limpieza de la habitación y del baño. Sin embargo el problema es que el parador es demasiado grande y cuenta con demasiados clientes, lo que hace que sea muy ruidoso tanto de día como durante la noche lo que impide un buen descanso. Además mi habitación se encontraba justo encima de la sala del desayuno, lo que hacía que todas las mañanas me despertaba mucho antes de lo previsto el ruido del movimiento de las mesas y sillas. Desayuno buffet bastante variado y de buena calidad, aunque por momentos faltaban algunos alimentos o no eran repuestos rápidamente. Lastima que haya sido imposible reservar el desayuno a la hora deseada debido a la gran afluencia de clientes. El personal del desayuno podría ser un poco más amable (quizás en número insuficiente y con demasiado trabajo). El restaurante propone una carta bastante variada de platos locales pero con precios excesivos con relación a la cantidad y a la calidad del producto servido. Personal del restaurante amable y competente. Relación calidad - precio de la cena inferior a la media lo que también se traslada a la estancia en general en dicho parador. Se sugiere considerar estas observaciones de manera a que el parador vuelva a tener el estándar habitual de los paradores españoles.
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